Arratzu, Pasaia y Talaia. Fin de semana intenso.

Zutik, Jon, Josu, Peio, Iñaki eta Imanol. Makurtuta, Willy, Lander, Mikel eta Asier.

Este finde nos hemos multiplicado. Si el sábado 27 por la mañana Peio se desplazaba a Arratzu-Urdaibai en su particular preparación de retos más largos con la mirada puesta en la Ehun milak de julio, por la tarde me tocaba a mí confirmar que el tobillo podía aguantar en carrera aunque fuese en distancia corta y disfrutar otro año más de la VI. Pasaiako mendi lasterketa, casi en familia. No llegamos a los 50 korrikalaris.

Pero la apuesta importante era el domingo 28 en la que once corredores de la sección tomaban parte en la  Donostia - Hondarribia (Talaia bidea) que por tercer año organiza el Fortuna KE y que cada año cuenta con más adeptos.

La mañana amaneció fresca y clara, perfecta para disfrutar de la carrera. Las amenazadoras predicciones que anunciaban algo de agua finalmente se quedaron solamente en eso, en predicciones. La cita era a las 09,30 en la grosera y renovada plaza de Catalunya y para los ceuveceros media hora antes en un punto previamente convenido para sacarse las fotos que acreditasen nuestra participación. Finalmente Sergio y Peio no comparecieron -para la foto- y se perdieron el único momento en el que todos compartimos posición. 

Tras las fotos, cojo la BTT y me planto a las 10,30 h. a la altura del segundo torreón de Jaizkibel. Mitad del recorrido (km. 14,5) y con buena parte de la ascensión ya en  las piernas. Tras breve espera veo aparecer al primer corredor Iker Oliveri (dorsal 73) y un minuto por detrás a Jokin Lizeaga (dorsal 2). Le veo más fresco y me da la sensación de que viene administrando sus fuerzas con inteligencia. Luego en meta, donde hace primero, se confirmará que también con eficacia.

Unos ocho minutos más tarde aparece un grupo de corredores y distingo la camiseta verde de Mikel. Buen ritmo, buena cara y aguantando el tirón. Poco después, Jon, dejándose llevar por otro corredor. Viene sufriendo pero muy concentrado. Casi ni me mira. A Sergio, que debutaba corriendo con la sección, no le distingo -todavía no le tengo fichado- y se me escapa del objetivo de la cámara. Luego llega Josu. Andando y en proceso de rodaje después del parón obligatorio de una temporada de esquí espectacular. Le animo y se anima a trotar. Hoy toca hacer kilometraje y no quemarse.

Del grupo de sufridores, Lander es el primero en aparecer. Le sigue de cerca Asier, cada vez más fino, luego Willy, Imanol, Iñaki, Peio Fadrique y por fin Peio Sarasola, sonriendo y disfrutando. Otra vez la bici, subo lo que me queda de puerto y desciendo hasta las campas de Guadalupe (km. 27) donde la organización tiene instalado el último avituallamiento antes de meta y el ambiente es de fiesta y las familias, amigos y paseantes animan a unos corredores en cuyas caras se refleja ya el sufrimiento del esfuerzo. No consigo llegar a tiempo de ver el paso de Mikel que debe haber apretado en la segunda mitad de la carrera. Enseguida aparece Jon, luego Josu, que se para a charlar y luego sigue andando. Otra vez le animo y se anima. En continuo goteo pasan Lander, Asier, Willy, Peio e Iñaki a quien sus hijas, que le esperan en la campa para correr con el unos metros, le arrancan una sonrisa de oreja a oreja. Sergio e Imanol se me despistan.

Otra vez sobre la bici y descenso a la meta instalada bajo las murallas de Hondarribi.Gentío en el que me resulta imposible encontrar a nadie. Por fin, aparece Asier con la bolsa de "finisher". Feliz y freso. No se lo digo pero me da mucha envidia. A Willy lo encuentro al pie del Polideportivo.Es la una y cuarto del mediodía. Otra vez bici y a la estación de Renfe en Irún. De vuelta a casa examino las fotos que acompañan esta entrada. Todo es mejorable.

Os dejamos, la clasificación de la Tuga-Arratzu Urdaibai  y la clasificación de la Talaia.

Y por descontado las fotos de la Talaia.